¡Esta boda en la Estufa Real tiene tantos detalles que me encantan! Primero, ¡es una boda de noviembre! Como alguien que está completamente enamorada del otoño, y siendo que la mayoría de las bodas ocurren de mayo a octubre, tener una boda en noviembre me hace muy feliz. Todo cambia cuando esto sucede; la naturaleza tiene colores diferentes, el sol tiene matices de naranja distintos y hasta los invitados se visten de manera diferente... ¡así que todo es completamente nuevo! Todo se une de una manera cálida y acogedora, a pesar de estar más cerca de las temporadas frías.

Lo otro que me parece increíble de esta boda es el lugar, ya que es uno de mis favoritos en Lisboa: la Estufa Real. Este espacio está ubicado en el Jardín Botánico de Ajuda, barrio en el que viví durante casi 10 años, así que solía visitar de vez en cuando para ver cómo cambiaba el jardín de una estación a otra.

Por último, pero no menos importante, también me encantan los días de lluvia, así que, incluso sin estar invitada, tuvimos un poco de lluvia a lo largo del día. Pero si me preguntas, le añade un toque especial a una boda en noviembre, tal vez aporte más del ambiente cálido y acogedor que Rita y João querían para su boda íntima.

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This wedding in Estufa Real has so many details that I absolutely love! First, this is a November wedding! As a person completely in love with fall, and being that most weddings happen from may to October, having a November wedding makes me very happy! Everything changes when this happens, nature has different colors, the sun has different shades of orange, and even the guests dress differently... so everything is completely new! So everything just comes together in a warm and cozy way, despite being closer to the colder seasons!

The other amazing thing for me about this wedding was the venue, as it is one of my favorites in Lisbon - Estufa Real. This venue is placed right in the Botanical Garden in Ajuda, neighbourhood in which I lived for nearly 10 years, so I would visit from time to time to check how different the garden looked like season after season.

Last, but not least, I also happen to love rainy days, so even without being invited we had a bit of rain throughout the day. But if you ask me, it adds a special thing to a November wedding, maybe it brings more of the warm and cozy mood Rita and João wanted for their intimate wedding.

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